Por Lisselotte Morillo Eichner

Inflación, recesión, precios de casas en récord históricamente altos, es lo que escuchamos a diario en noticias, páginas web, radio, TV etc. Pero, tal y como lo declaró el negociante Warren Buffet, todavía no ha conocido a una persona que pueda predecir la economía. Si, es cierto que hay índices que pueden manipular las tendecias económicas sin embargo hay movimiento naturales y fenómenos de la economía que no obedecen a controles internos.

En este orden de ideas, existe una teoría que dice: Lo que sube tiene que bajar, ¿no? Bueno, la ley de la gravedad de Newton ha sido probada bajo presión en los últimos años, ya que los compradores de viviendas han visto con ansiedad cómo los precios de las viviendas han subido y subido hasta niveles récord a raíz de la pandemia de COVID-19.

En los últimos meses se ha evidenciado tendencias como: crecimiento de precios mensual de dos dígitos en mercados muy buscados, pánico y desesperación entre muchos aspirantes a compradores de vivienda, entonces los aumentos de precios han parecido imparables, sin embargo tenemos que analizar que está sucediendo en otros estados.

El mercado de la vivienda de primavera tuvo un buen comienzo, el aumento de las tasas de interés hipotecario que supera el 5%, además de la alta inflación y el aumento de los alquileres, parece estar comenzando a moderar de forma muy pequeña los altos precios, en ciertos mercados de la vivienda. Para ser claros: la accesibilidad general sigue siendo un desafío. Muchos posibles compradores están siendo excluidos de la propiedad de vivienda debido a que las tasas hipotecarias más altas significan pagos mensuales de vivienda más caros. Pero cuando hay menos compradores compitiendo por casas y pujando por ellas, los precios suelen bajar.

En algunas áreas metropolitanas los precios de las viviendas están haciendo lo que recientemente parecía impensable: están bajando. Algunas de estas caídas se deben a que los precios crecieron demasiado fuera de lo que los locales en muchas comunidades podían pagar. Así que los precios tuvieron que bajar un poco para encontrar compradores.

En otros casos, no es que la misma casa cueste menos, los precios más bajos se deben a que se ponen a la venta menos casas más grandes, que generalmente alcanzan precios más altos. Las áreas metropolitanas incluyen la ciudad principal y los pueblos, suburbios y áreas urbanas circundantes.

Muchas de las áreas metropolitanas que experimentan caídas en el precio de lista promedio han visto una afluencia de casas más pequeñas en el mercado, que tienen precios más bajos. Al mismo tiempo, varias de las ciudades tienen tasas de desempleo que, si bien aún son históricamente bajas, están por encima del nivel nacional. Esto podría indicar que los compradores pueden enfrentar desafíos de asequibilidad más pronunciados debido al aumento de las tasas hipotecarias.

Esto no es una repetición de la Gran Recesión cuando estalló una burbuja inmobiliaria y los precios se desplomaron en todo el país. En este momento estas correciones se perciben como en su mayoría disminuciones más pequeñas que no presagian otro colapso, por ahora.

Esta es la lista que publicó la página web realtor.com sobre las 10 ciudades que han experimentado disminución pequeña de precios.

Toledo, OH, Springfield, MA, Rochester NY, Detroit MI, Pittsburg, PA, Tulsa OK, Los Angeles, CA, Memphis, TN, Chicago, IL, Richmond, VA.

Una de las que mas nos sorprende de la lista es Los Angeles, ya que esta ciudad se ha caracterizado por siempre liderizar en precios excesivos.

Sientes que esta lista te ha ayudado a ver las ciudades donde los precios están comenzando a corregir. Dejanos un mensaje al final de este post si estás interesado en tener mas información del mercado de casas.